El otoño es, probablemente, la mejor estación para visitar La Rioja.
Con la vendimia en plena ebullición o recién terminada si vas a finales de octubre o en noviembre, y mientras comienzan a llegar los primeros racimos de uva tinta a las grandes bodegas, disfrutar del mosaico de colores que ofrece el paisaje donde mandan los ocres, rojos, morados y amarillos y empiezan a crecer las setas, invita a seguir en autocaravana los pasos del vino por los valles riojanos, de manera pausada y disfrutando de cada instante.
Os dejamos aquí el resto de este interesante artículo.