En el otoño, aunque todavía hará un poco de calor, la temperatura comienza a ser un poco fría, llueve abundantemente y el paisaje empieza a cambiar de color; las hojas caen al suelo, los árboles entristecen; el cielo durante el otoño nos deja ver una hermosísima luna y muchísimas estrellas.
Nosotros esperamos
envueltos por las hojas doradas.
El mundo no acaba en el atardecer,
y solamente los sueños
tienen su límite en las cosas.
El tiempo nos conduce
por su laberinto de hojas blancas
mientras cae el otoño
al patio de nuestra casa.
Envueltos por la niebla incesante
seguimos esperando:
La nostalgia es vivir sin recordar
de qué palabra fuimos inventados.
«Mientras cae el otoño» de Giovanni Quessep